Ha sido un día mágico por lo que he vivido esta mañana en el instituto. Aún me encuentro en estado de schock. Una persona me solicita una cita. En un primer momento, pintaba difícil cuadrar los tiempos de ambas partes. Me sorprendí de quién partía la demanda: persona madura intelectual y emocionalmente, extravertida, optimista. Pero enseguida he captado que tenía una gran necesidad de hablar y, si, hemos conseguido hacerlo. Me he encontrado con una persona de una resiliencia aplastante, empática, con las ideas y los sentimientos muy claros, con gran capacidad de automotivación, con estilo atribucional interno, autocrítica y reflexiva. Pero también he visto a una persona con un nivel de autoexigencia muy alto y con una autoestima muy baja. Cree y confia en la Psicología. Diría más, apuesta por la Psicología. Yo también. Si la Psicología no hubiera entrado en mi vida del modo que lo ha hecho, sin duda, yo no sería la misma Más tarde he encontrado unas palabras que bien podrían reflejar a esta persona:
"Los ríos no beben su propia agua, los árboles no comen sus propios frutos.
El sol no brilla ara sí mismo y las flores no esparcen su fragancia para sí mismas.
Vivir para los otros es una regla de d¡la naturaleza.
La vida es buena cuando tú estás feliz,
pero la vida es mucho mejor cuando los otros son felices por causa tuya.
Nuestra naturaleza es el servicio:Quien no vive para servir, NO sirve para vivir".
Enseguida he pensado en MAMÁ.
La entrevista de esta mañana ha sido estremecedora. El testimonio narrado por esta persona me ha puesto "los pelos como escarpias" todo el tiempo que ha durado la charla. Casi en una hora, me ha enseñado muchísimo. GRACIAS😏
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